Con la aplicación de la segunda capa de asfalto y obras complementarias, está próximo a culminar esta etapa del proyecto, que consolida el sueño de 28.000 habitantes de la región y la conexión de los colombianos hacia los diferentes lugares del territorio nacional, abriendo caminos de desarrollo y progreso.
El Batallón de Ingenieros de Construcciones N.° 51, está próximo a entregar a los llaneros, cinco kilómetros de vía, que une los municipios de San Juan de Arama, Mesetas y Uribe, permitiendo la movilidad de esta zona del suroriente colombiano.
«En los últimos días se realizó la aplicación de 737 metros de la segunda capa asfáltica, finalizando con obras complementarias que nos van a permitir entregar cinco kilómetros en pavimento flexible. Para la materialización de este importante proyecto de la transversal de La Macarena, el Ejército Nacional dispuso de más de 600 hombres del Batallón de Ingenieros de Construcciones N. 51, que aportaron sus conocimientos y experiencia en la construcción de la vía, bajo los más altos estándares de calidad, a fin de beneficiar a más de 28.000 habitantes de los municipios de San Juan de Arama, Mesetas y Uribe, impactando en el mejoramiento de su calidad de vida, el comercio y el ecoturismo, en esta próspera región del llano», afirmó el teniente coronel Carlos Alberto Castrillón Mora, comandante de esta unidad.
Un proyecto vial que desde el año 2019, inició en su última fase, con la construcción de cinco kilómetros para hacer realidad la consolidación de este trayecto, gracias al compromiso del Ejército Nacional con los ingenieros militares, que trasciende el ámbito nacional, ya que conecta estos municipios con el resto del país y a su vez, brinda múltiples posibilidades de desarrollo social y económico a los colombianos.
El Ejército Nacional a través de los ingenieros militares avanza en la transformación de los territorios a través de sus capacidades y profesionalismo al servicio de la nación, con obras de infraestructura de gran impacto social, mejoramiento de la malla vial en las comunidades vulnerables, apoyo humanitario y la descontaminación de tierra con sospecha de minas antipersonal, mitigando las necesidades más sentidas de los colombianos, brindando así, bienestar y esperanza.
