En el primer procedimiento fue capturada Yamile Morales García quien es investigada por su presunta responsabilidad en la llamada extorsiva a una ama de casa del municipio de Tunja.
La víctima en enero de 2014 fue contactada por parte de un supuesto sobrino suyo. En la comunicación su “familiar” le manifestó que había atropellado a una niña y la Policía Nacional le estaba pidiendo colaboración económica para no judicializarlo. La mujer, de 42 años de edad, realizó dos consignaciones a través de una empresa de giros; una de ellas por 700 mil pesos a nombre de Yamile Morales García.
El segundo caso se presentó en septiembre de 2019 cuando un residente del municipio de Sutatenza recibió una llamada de una persona que dijo ser miembro del Ejército de Liberación Nacional (ELN). En la llamada le reclama a la víctima por la falta de entrega de 10 uniformes camuflados; acuerdo al que supuestamente había llegado con el hijo de la víctima.
El supuesto comandante del grupo al margen de la Ley, en medio de amenazas contra su familiar, indicó que debían consignar un millón de pesos a nombre de Karen Lizeth Gómez Boada quien finalmente realizó el retiro del dinero. La transacción debía realizarse a través de una empresa de mensajería.
Las dos procesadas fueron imputadas por los delitos de extorsión agravada en grado de complicidad. En el marco de las audiencias respectivas las dos mujeres aceptaron su responsabilidad en los cargos imputados por la Fiscalía.
