Las capturas, según la Policía, se dieron principalmente por daños en bien ajeno, en bienes públicos y ataques a servidores del Estado.
Desde el Puesto de Mando Unificado, en la dirección de la Policía en Bogotá, las autoridades entregaron balances de las manifestaciones registradas en varias ciudades y municipios del país durante este 20 de julio.
El director de la Policía, el General Jorge Luis Vargas, aseguró que fueron detenidas 25 personas por hechos de perturbación al orden público y generar daños.
“Por los delitos de daños en bien ajeno, obstrucción a vía pública o lo que comúnmente conocemos como bloqueos, daño en bien público, lanzamiento de sustancias peligrosas a la Policía Nacional, violencia contra servidor público y otros delitos”, explicó el General.
Las 25 capturas se realizaron en seis ciudades y regiones del país. Se trata de 9 detenciones en Pasto. 4 se efectuaron en Cundinamarca. 6 más se registraron en Bogotá. 2 personas capturadas en Manizales. 3 en Cali y por último una más en Pereira.
Además, las autoridades reportaron que 21 integrantes de la Policía resultaron con lesiones durante hechos violentos en ciudades como Bogotá, Pasto, Cali y otras.
Las autoridades reportaron daños en un CAI de Pasto, dos cajeros automáticos, cuatro sedes de entidades públicas, tres motocicletas, un bus articulado de TransMilenio en Bogotá.
“Se ha desarrollado una jornada de manifestaciones en su gran mayoría pacíficas, sin embargo hemos tenido algunas afectaciones, hechos de violencia aislados. Situaciones que afectaron los derechos de los ciudadanos”, enfatizó el ministro de Defensa Diego Molano.
Según el Gobierno Nacional, a través del Ministerio del Interior, en todo el país se registraron 195 actividades durante el 20 de julio.
“129 concentraciones, 58 marchas, 18 movilizaciones. Estas actividades se registraron en 95 municipios de 23 departamentos incluyendo a Bogotá”, aseguró el ministro del Interior, Diego Palacios.
La Policía aseguró que seguirán los esquemas de vigilancia y control en todo el país con 65.000 uniformados para contrarrestar hechos violentos y contrarios a la ley.
